La vida económica y laboral en Culiacán, Sinaloa, comenzó a reactivarse tras nueve días de violencia, jornadas que dejan varias personas sin vida, otras desaparecidas y casas incendiadas.
Los comercios volvieron a abrir sus puertas, la gente salió a comprar y el transporte urbano se regularizó.
Pese a la reanudación de clases presenciales en el nivel básico, se reportó un ausentismo de aproximadamente 30 por ciento, mientras que las universidades y escuelas particulares se mantienen con clases virtuales.
En el noveno día de violencia se reportó el hallazgo de cuatro personas asesinadas en Culiacán y la quema de varias viviendas en el municipio de Eldorado.