Otros que aplauden la cancelación de Calaverandia y Navidalia en el Parque Metropolitano son los patos, ardillas, palomas, mapaches y uno que otro conejo que viven en esa área verde.
En voz de grupos de activistas animalistas se había advertido sobre el daño que estas atracciones causarían no solo a la flora sino también a la fauna del parque, algo que ya había notado Doña Rosita, asidua visitante al lago del Parque Metropolitano.
“Son menos patos porque vuelvo a repetir antes eran muchos y ahora son pocos mire nada más los poquitos qué hay ahí -¿Y a qué lo atribuye usted?- Pues a todo el ruido, eso les molesta, lo que no entiendo es qué pasa, si se van o qué pasa porque hay menos patitos”. (Por José Luis Jiménez)