Con un importante despliegue de seguridad ante el riesgo de hostilidades, el ayuntamiento de Tonalá acudió a clausurar parcialmente el basurero de Matatlán, al vencerse el plazo a la empresa Caabsa para retirar los desechos que llevó ahí desde noviembre pasado con el cierre del vertedero de Los Laureles.
En un ambiente de tensión, se logró un acuerdo con los pepenadores, pues al seguir operando el espacio como central de transferencia, continuarán laborando en el sitio. Habla un dirigente apodado El Piojo:
“Nos están garantizando que el trabajo no va a dejar de entrar y las góndolas para sacar la basura, ¿cómo ven ustedes, está bien o está mal? ¡Está bien!”.
El ayuntamiento realizará el enmallado de la zona que no puede ser usada por Caabsa. Con quienes no se logra un acuerdo, es con los operadores de góndolas y camiones. Uno de los argumentos es la distancia que les tomará ir hasta Picachos. Siguen las negociaciones con este grupo. (Por Héctor Escamilla Ramírez)