Fueron sepultados los padres jesuitas Joaquín Mora y Javier Campos, asesinados el pasado 20 de junio, en la parroquia de la comunidad de Cerocahui, Chihuahua.
Los sacerdotes fueron sepultados en el atrio de la parroquia, donde ya hay restos de otros dos sacerdotes de la misma orden.
Durante las exequias, el sacerdote jesuita Luis Gerardo Moro, provincial de los Jesuitas de México, subrayó que, a pesar de la violencia y de las muertes de Javier y Joaquín, no dejarán las tierras de los rarámuri ni su labor evangélica y de apoyo a los más necesitados. (Foto: Cuartoscuro)