Por unanimidad, el pleno del Senado prohibió que las madres, padres o cualquier familiar o adulto utilice a las niñas, niños y adolescentes para mendigar y estableció la obligación de los adultos y las autoridades federales, estatales y municipales de vigilar que los menores de edad no vivan en situación de mendicidad.
El Senado precisa que en México cerca de cinco millones de niñas, niños y adolescentes padecen violencia sexual, en tanto que datos del Coneval arrojan que la mitad de la población infantil vive en condiciones de pobreza, tres millones 720 mil se encuentran en pobreza extrema, y uno de cada 10 no asiste a la escuela.