A pesar de lo que digan los legisladores, la renuncia de los ministros de la Suprema Corte no está sujeta a la aceptación del Senado, pues la misma reforma judicial así lo dispuso, como explica la magistrada Adriana Ortega.
“En este caso el transitorio no deja lugar a dudas, esta renuncia no está sujeta a aprobación del Senado. La renuncia con base a este artículo aclaratorio que les indica a los ministros cómo, cuándo y dónde deben renunciar. No establece ninguna condición para que el Senado apruebe esta renuncia, tan esa así, que el Senado está haciendo como sugerencias para modificar este transitorio”.
Pero además, hay otro transitorio en la misma reforma en la que especifica que no hay oportunidad de hacer una interpretación a lo que expresa, letra por letra, la reforma. (Por Arturo García Caudillo)