Hace 30 años a esta hora, los vecinos de la calle Gante no durmieron, el intenso olor a gasolina impregnaba sus casas y el miedo, la angustia y la incertidumbre los mantuvo en vilo prácticamente toda la noche.
“No dormimos, tenemos dos noches de no dormir por el olor muy fuerte. Empezó desde antier como a las 5:00 de la tarde, pero ya en la noche fue más fuerte y, bueno, todavía antenoche no sabíamos qué y nosotros creíamos que era nada más aquí en la casa, pero ya todo mundo empezó a decir y a decir que anoche y menos, anoche no dormimos de miedo”.
Una hora después de aquel 22 de abril de 1992, varias explosiones acabaron con por lo menos ocho kilómetros del sector Reforma… Casas, vehículos, negocios, pero sobre todo vidas.
La cifra oficial fue de 210 muertos, pero para testigos y vecinos fueron más de 800.
Hoy, a 30 años de las explosiones en el sector Reforma de Guadalajara, la herida continúa abierta por negligencia, sobre todo. (Por José Luis Jiménez Castro)