De momento, la Comisión Estatal de Derechos Humanos no ha recibido quejas de los artistas urbanos conocidos como botargas, que se disfrazan de personajes en el primer cuadro de Guadalajara para ganar dinero con las fotos que les toman. Ellos acusan que el ayuntamiento tapatío lo está retirando arbitrariamente del Centro,
La Cuarta Visitadora de la Comisión, Katya Rico Espinoza, señaló que antes de afirmar si existe una violación a derechos humanos, deben revisar la regulación en el Centro, pues al cobrarse las fotos que les toman, implica una actividad económica.
“El Centro Histórico como tal tiene ciertos requisitos para llevar a cabo la actividad económica, en el caos de las personas que se dedican a esta actividad, habrá que nosotros primeramente recibir alguna inconformidad de su parte y después identificar si es efectivamente es una actividad que se encuentra contemplada como parte del reglamento municipal”.
Autoridades señalan que estos artistas deben contar con permisos municipales, no para disfrazarse, sino para realizar su actividad en el Centro. (Por Héctor Escamilla Ramírez)