Por los altos costos que implican y porque deben aumentar hasta 30 por ciento el precio de sus platillos, incremento que terminan pagando los clientes, en el último año los empresarios del ramo gastronómico optaron por dejar las plataformas digitales de reparto y prefieren por tener a sus propios repartidores.
La encuesta desarrollada por el IIEG revela que ocho de cada 10 restaurantes cuentan con servicio a domicilio, pero entre 2020 y 2023 pasó de 73 a 84 por ciento los establecimientos que contrataron repartidores propios.
En 2020, el 23 por ciento de estos negocios usaban las plataformas móviles para vender y la cifra cayó a 14 por ciento en 2023. Las altas comisiones y la desconfianza son los principales motivos que dieron para no usarlas.
El estudio reveló otro dato: en los últimos tres meses, 57 por ciento de los restaurantes encuestados tuvo que aumentar sus costos y en la mayoría, se argumentó que fue la inflación en varios insumos básicos de sus platillos. (Por Héctor Escamilla Ramírez)