Este martes, un contingente de 300 efectivos del Ejército y la Guardia Nacional llegó a Nuevo León para reforzar la seguridad y combatir la delincuencia organizada.
Equipados con 35 vehículos, su misión es preservar la libertad y el orden en la región, donde realizarán patrullajes, reconocimientos y establecerán puestos de seguridad militar.