Ante el reciente aumento de la violencia en Salamanca, las fuerzas de seguridad de los tres niveles de gobierno han establecido una estrategia de blindaje que incluye patrullajes aéreos y terrestres, extendiéndose también a otros municipios de la Zona Laja Bajío. Durante una mesa de seguridad interinstitucional, se anunció el despliegue de 400 elementos del Ejército, quienes se encargarán de resguardar las entradas y salidas de la ciudad para reforzar la seguridad en la región.