El Pleno de la Comisión Permanente, aprobó la licencia solicitada por el diputado panista, Santiago Creel, quien aunque no tenía necesidad ni obligación legal de hacerlo, prefirió apartarse para que su labor legislativa no interfiriera con su aspiración a convertirse en presidente de la República, como explica su compañero Jorge Triana.
“No tenía por qué pedir licencia, pero aquí los apetitos personales, las torpezas, la estulticia, las ganas de llamar la atención para ver si alguien les hace caso, pues ganaron y empezaron a insistir una y otra vez con la licencia, incluso dieron a conocer torpemente todos los nombres de la nómina de la Presidencia de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, con el afán de golpear, tachándolos de aviadores, cuando es gente que trabaja todos los días y está probado”.
Lo que no se aprobó fue el acuerdo para que la diputada Martha Estela Romo ocupara la vicepresidencia que Creel tenía en la Permanente, por lo que el sitio quedó vacante. (Por: Arturo García Caudillo)