A cuatro días del arranque de su administración, el gobernador electo, Pablo Lemus Navarro, confirma que por cuestiones de seguridad y para no molestar a sus vecinos, sí se mudará a Casa Jalisco, una vez que se hagan labores mínimas de mantenimiento.
El nuevo Ejecutivo estatal indica que no tiene prisa por mudarse, por lo que le pidió a Enrique Alfaro, que permanezca en el lugar hasta el último día de su administración, es decir el cinco de diciembre.
Adelanta también que quitará las vallas de Palacio de Gobierno y Casa Jalisco, porque privilegiará el diálogo.