Las obras del Peribús han dejado sin acotamiento al Periférico, cualquier choque, cualquier descompostura, cualquier llanta ponchada deja en alto riesgo a los automovilistas, pues no les queda otra que pararse sobre el mismo Periférico, aquí el conductor a quien en esta mañana se le ponchó una llanta en pleno Periférico.
“No hay, aquí está bien peligroso pararse aquí, como ahorita que está descompuesto, la gente viene echa loca, aquí donde está la salida y pues no hay acotamiento -¿cómo le hiciste para pararte aquí?- Pues ahora sí nomás a donde llegue”.
La falta de acotamiento, como ha dejado la Secretaría de Infraestructura y Obra Pública al Periférico también convierte a esta arteria en un verdadero cuello de botella, sobre todo cuando un choque ocurre justo donde está también una estación del Peribús. (Por José Luis Jiménez Castro)