Monserrat y David, ambos profesionistas, lograron del 2020 a la fecha la adopción de dos niñas y un niño institucionalizados, este último ayer, cuando con el DIF Guadalajara concluyeron el proceso legal.
“Nuestros hijos son hijos, lleguen de forma biológica o adoptiva. Los chicos llegan a la familia desde un proyecto de vida. Mi esposo y yo, mi esposo se llama David, él es médico y yo soy licenciada en comunicación pública, cuando éramos novios decidimos que el proyecto de pareja, de familia que queríamos tener era ampliar nuestra familia después de estar casados. El hecho de tener hijos podría caber en esos planes. Cuando platicamos sobre la posibilidad de tener la adopción ambos estuvimos de acuerdo”.
Pese a no tener ningún problema de salud para un embarazo, decidieron adoptar, por lo que tras una certificación y la realización de sus trámites, finalmente tuvieron a sus tres hijos.
El proceso, dice, es riguroso porque se trata de garantizar que estos menores, estén en familias amorosas que les garanticen su desarrollo. (Por Gricelda Torres Zambrano)