El Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación se convirtió en un auténtico ring, en el que la mayoría salió triunfante al aprobar llevar a cabo la revisión de la constitucionalidad de la reforma judicial. La ministra militante de Morena, Lenia Batres, acusó a sus compañeros de querer dar un golpe de Estado.
“De tal manera que, si la Suprema Corte se arroga atribuciones que no tiene, viola el principio de supremacía constitucional, así como la división de poderes y el estado constitucional de derecho. La Suprema Corte estaría dando un auténtico, y lo digo con todas sus letras, golpe de Estado”.
El ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá, respondió.
“El planteamiento de analizar la constitucionalidad de una reforma constitucional ha sido defendido y defendido bien y promovido, incluso, por el partido que hoy goza del oficialismo, nadie en ese momento los acusó, en este pleno, de golpistas”. (Por Arturo García Caudillo)