Ante los altos niveles de contaminación ambiental que vive la ciudad de Monterrey, la presidenta de la Cámara de Diputados, Marcela Guerra, hace un llamado al Gobierno Federal para cerrar la Refinería de Cadereyta, al considerar que es la principal fuente de este problema.
“Para hacer entender a la industria pública que es Pemex, que es de todos nosotros los mexicanos, incluido Nuevo León, para que cierre la Refinería de Cadereyta por estar ya definitivamente ya fuera de modernidad, ya es prácticamente un monumento a la arqueología, a la chatarra, que lo único que hace es contaminar y no estoy tan segura, no estamos tan seguros de que siga produciendo la calidad de gasolina que merecemos los mexicanos”.
Al mismo tiempo, el Gobierno de Nuevo León debe hacer su labor y obligar al cierre de aquellas empresas que siguen utilizando carbón y combustóleo como principales fuentes de energía. (Por Arturo García Caudillo)