Los familiares y herederos de Enrique Kiki Camarena, agente de la DEA asesinado en 1985, demandaron ante una corte civil de Estados Unidos a varios antiguos líderes del Cártel de Sinaloa, entre ellos, al capo Rafael Caro Quintero, a los que acusan de ser responsables de múltiples delitos, entre estos, homicidio y terrorismo.
El documento de 40 páginas presentado ante la Corte de Distrito del Sur California, detalla las conductas que serían atribuibles a los narcotraficantes mexicanos y su implicación en el asesinato del agente Camarena, por lo que exigen a cambio una indemnización que podría ascender a decenas de millones de dólares.
