La Reserva Federal de Estados Unidos decidió mantener su tasa de interés entre 5.25 y 5.50 por ciento, después de su reunión para determinar si tendría un cambio ante los datos de la inflación en ese país.
En su último encuentro, que tuvo lugar el 30 y 31 de enero, se decidió mantener los tipos de interés en el nivel actual, su máximo nivel desde el 2001.
Adelanta que si la economía estadounidense evoluciona positivamente, este año habrá reducciones en la tasa de interés.