La FAO advirtió que, a pesar de que se producen suficientes alimentos para abastecer a la población global, el hambre sigue afectando a 733 millones de personas.
Este problema persiste debido a factores como conflictos bélicos, crisis climáticas y recesiones económicas.
La organización subrayó que la alimentación, tras el aire y el agua, es una necesidad humana fundamental y todos deberían tener acceso a una dieta adecuada.