Elon Musk generó controversia tras afirmar en X que dictadores como Stalin, Mao y Hitler no fueron directamente responsables de millones de muertes, sino los empleados del sector público.
La declaración provocó una respuesta contundente de la Federación Estadounidense de Empleados Estatales, que defendió el trabajo de maestros, enfermeros y bomberos, rechazando la insinuación del magnate.
En medio de boicots contra Tesla y críticas por su cercanía con el gobierno de Estados Unidos, Musk también intentó refutar acusaciones de simpatía nazi al compartir una imagen del primer ministro israelí junto a un Tesla.
No es la primera vez que el empresario enfrenta señalamientos por comentarios controvertidos.
