La presidenta Claudia Sheinbaum descarta la posibilidad de quitar el tope al precio del gas LP, y aclara que este combustible no está subsidiado.
“El precio del gas LP tiene que tener un precio razonable, que le permita ganancias al gasero, pero que sea un precio que permita que las familias mexicanas, todas las que usan gas LP no estén pagando de más. ¿Cuál es la razón de liberalizar el precio? Si la fórmula establece, está establecida a partir del precio internacional de los costos de transporte y al mismo tiempo la ganancia. Es el único combustible que en esto caso tiene estos límites de precio hacia arriba”.
De hecho, dice, en el caso de las gasolinas y el diésel, el tope se da a partir del financiamiento fiscal que se aplica al IEPS, y depende de las fluctuaciones en el precio internacional del petróleo. (Por Arturo García Caudillo)