La Organización Mundial de la Salud declaró el actual brote de viruela del mono en la República Democrática del Congo, que se propagó por 13 países africanos, como una emergencia de salud pública de alcance internacional.
Esta es la segunda vez en dos años que se considera que esta enfermedad infecciosa puede convertirse en una amenaza sanitaria internacional.
La alerta se levantó en mayo del año pasado tras contenerse su propagación y considerarse que la situación estaba bajo control.