El Centro de Justicia para la Paz y el Desarrollo mejor conocido como CEPAD, a través de su coordinadora Anna Karolina Chimiak, condenó que en Jalisco en menos de un mes, dos madres buscadoras hayan sido asesinadas.
El caso más reciente es el de María del Carmen Morales, ejecutada junto con su hijo la noche de ayer en Tlajomulco en Zúñiga, antecediéndole el crimen de Teresita, integrante del colectivo Luz de esperanza hace apenas unas semanas.
“Las familias buscadoras tienen derecho a buscar sin temor ni agresiones ni amenazas en su contra, y la búsqueda de personas desaparecidas tanto en Jalisco como en México se ha convertido en un acto que puede costar las vidas. A lo largo de los últimos años las autoridades han fracasado por completo para garantizar las medidas de protección efectiva e integral a las personas buscadoras”.
CEPAD exigió acciones inmediatas para garantizar condiciones seguras de búsqueda, además de pedir a la Fiscalía del Estado una investigación seria, exhaustiva e independiente. (Por Edgar Flores Maciel)
