Luego de las anomalías halladas en la Escuela de Paramédicos del ayuntamiento de Guadalajara que prevalecieron 30 años, este fin de semana egresó la primera generación de técnicos en urgencias médicas que fueron regularizados.
Estos paramédicos pasaron por una certificación, pues entre las fallas halladas en esta institución estaba que la escuela no contaba con reconocimiento de validez oficial. Lo explica Andrea Blanco, coordinadora de Construcción de la Comunidad del ayuntamiento tapatío.
“A graduar a la primera generación de paramédicos que regularizamos de paramédicos; 82 paramédicos, les hicimos esta capacitación de alrededor de un mes”.
Fueron en total 31 generaciones de paramédicos cuyos estudios carecían de certificación. Blanco expresó que para evitar de nuevo esta situación se buscará que la Universidad de Guadalajara pudiera hacerse cargo de la Escuela de Paramédicos para garantizar la validez de estudios. (Por Héctor Escamilla Ramírez)