El presidente Joe Biden anunció este martes un embargo sobre la importación estadounidense de petróleo y gas rusos, para aumentar las sanciones impuestas a Rusia y “asestar otro duro golpe” al presidente Vladimir Putin.
La decisión se tomó “en estrecha coordinación” con los aliados de Estados Unidos, informa la Casa Blanca, al subrayar que no contribuirá a subvencionar la guerra de Putin.
Estados Unidos es un exportador neto de energía, es decir que produce más petróleo y gas del que consume, recordó Joe Biden.