El Banco de México recortó sus pronósticos de crecimiento de la economía nacional de 2.4 a 1.5 por ciento para este año, tras reconocer que “la actividad económica nacional atraviesa por un período de marcada debilidad e incertidumbre” y con mayores riesgos a la baja en el empleo.
La gobernadora del banco central, Victoria Rodríguez, señaló además que el balance para la inflación continúa sesgado al alza, por lo que los ajustes en las tasas de interés serán graduales y cuando las condiciones macroeconómicas lo permitan.