La Administración de Fármacos y Alimentos de Estados Unidos aprobó el refuerzo de las nuevas vacunas de Moderna y Pfizer, adaptadas a la variante ómicron y sus subvariantes, que podrán ser aplicadas a partir la próxima semana.
Se trata de una dosis de refuerzo que se podrá administrar a las personas que lleven más de dos meses con la vacuna o el refuerzo anterior.
La inoculación de Moderna está autorizada como dosis única de refuerzo en personas mayores de 18 años, mientras que la Pfizer está autorizada también para su uso en niños mayores de 12 años.