Alabama ejecutó a un asesino convicto con gas nitrógeno, un método único que desató debate en Estados Unidos sobre la pena capital y que los críticos lo calificaron de cruel y experimental.
Kenneth Eugene Smith, de 58 años, fue declarado muerto a las 8:25 de la noche en una prisión de Alabama, después de respirar gas nitrógeno puro a través de una máscara facial para provocar falta de oxígeno.
Se trata de la primera vez que se utiliza este método de ejecución en Estados Unidos desde que se introdujo la inyección letal en 1982.