Un sismo de magnitud 6.2 con epicentro en el mar de Mármara estremeció este miércoles a Estambul y regiones cercanas, causando pánico, pero sin dejar daños mayores ni víctimas confirmadas, según autoridades turcas.
El temblor se produjo a 10 km de profundidad y fue seguido por varias réplicas, incluida una de 5.3.
Aunque en zonas como Zeytinburnu se reportaron heridos leves por caídas, el ministro del Interior indicó que no hubo derrumbes importantes.
El sismo reavivó el temor al “gran terremoto” que amenaza la región, donde muchos edificios siguen en riesgo por la densidad urbana y el historial sísmico del país.
