La empresa Colossal Biosciences ha logrado un hito en la biotecnología al recuperar al Canis dirus, conocido como lobo terrible, extinto hace 13 mil años.
A partir del ADN extraído de fósiles hallados en Ohio e Idaho, y tras identificar 15 genes clave, los científicos editaron células del lobo gris moderno para dar vida a los primeros ejemplares clonados: Rómulo, Remo y Khaleesi.
Más robusto y poderoso que el lobo gris, el lobo terrible fue un depredador emblemático del Pleistoceno.
Su reaparición abre un profundo debate sobre las implicaciones éticas y ecológicas de la “desextinción” de especies.
