Autoridades estadounidenses anunciaron un operativo de seguridad para proteger la investidura presidencial de Donald Trump, prevista para el 20 de enero.
Un total de 25 mil agentes y militares de la Guardia Nacional estarán desplegados para garantizar el orden, mientras que la zona del Capitolio se blindará con un cerco de 48 kilómetros de vallas.
El jefe de la Policía del Capitolio, Thomas Manager, destacó que la principal amenaza es un posible ataque de un individuo en solitario.