El atacante mexicano Santiago Giménez se lució con una extraordinaria actuación al anotar dos goles y dando una asistencia para que el Feyenoord se proclamara campeón de la Supercopa de Países Bajos luego de imponerse en penales por 4-2 al PSV tras empatar 4-4 en los 90 minutos reglamentarios.
Fue un gran juego que se celebró en el Philips Stadion de Eindhoven donde el ‘Chucky’ Lozano se quedó en la banca y Santi Giménez jugó 69 minutos. (Por Martín Navarro Vásquez)