El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció una orden ejecutiva que busca restringir de manera drástica las solicitudes de asilo en la frontera con México, en lo que supone una de sus medidas migratorias más duras y que llega en plena campaña para las elecciones de noviembre próximo.
La orden permitirá a las autoridades estadounidenses deportar a quienes no cumplan con estrictos estándares de asilo cuando se supere la cifra de 2 mil 500 detenciones diarias en la frontera durante un promedio de siete días.