Nikki Haley se bajó de la carrera por la candidatura presidencial del Partido Republicano dejando al ex mandatario Donald Trump como el único aspirante para la Casa Blanca de este partido conservador.
Haley fue la última de la casi decena de políticos republicanos que buscaban la candidatura presidencial de este partido y que terminaron dimitiendo poco a poco ante un Trump que los superaba por más del 50 por ciento de las preferencias.
La revancha entre Donald Trump y el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, es prácticamente una garantía este noviembre pese a que ambos políticos enfrentaron varias críticas para llegar a la candidatura presidencial de sus respectivos partidos.