El tiroteo que se desató al término del festejo por el triunfo de los Kansas City Chiefs en el Super Bowl no tuvo una motivación terrorista, sino fue resultado de una “disputa entre varias personas”, afirmó la policía, que mantiene una investigación abierta sobre lo ocurrido.
De acuerdo con las autoridades, el tiroteo no tiene que ver ni con terrorismo ni con extremismo nacional y tampoco fue un ataque motivado por la celebración.
La Policía informa que el hecho “parece haberse tratado de una disputa entre varias personas que terminó en un tiroteo” en el que por lo menos 21 personas resultaron heridas.