El presidente Andrés Manuel López Obrador, dio su visto bueno a las reuniones que han llevado a cabo obispos de Guerrero con líderes de grupos criminales en busca de apaciguar al país.
“Todos los que pueden ayudar, lo hace la Iglesia, me consta en Michoacán y lo hacen en otras partes. Nosotros lo vemos bien, lo vemos muy bien, nada más que nada de acuerdos que signifiquen conceder impunidad, privilegios, licencias para robar, pero el que quiere abandonar ese infierno, ¿cómo dice la canción? La jaula aunque sea de oro, ¿no? No deja de ser prisión. Lo puede hacer”.
Y consideró como camajanes a la gente que un día en la carretera le preguntaron si los delincuentes son seres humanos para luego sacar el video en redes, pero reiteró que como él no es fascista, sigue con la idea de que la violencia no se combate con la violencia. (Por Arturo García Caudillo)