Un empleado de Aseo Público del Ayuntamiento tapatío fue destituido de forma definitiva de su empleo y no podrá ocupar ningún cargo del servicio público por un año, al comprobarse su responsabilidad en actos de acoso sexual, hostigamiento laboral y violencia en razón de género.
Esta persona ya había sido separada de su cargo desde febrero por acosar a la trabajadora que se desempeñaba como su subordinada.
El individuo incluso mandaba mensajes amenazantes a la víctima.
Lo explica la contralora estatal, Cynthia Cantero Pacheco.
“Que el hostigamiento y el acoso sexual es un delito y además una falta administrativa que se sanciona incluso con la destitución del empleo de quien realiza este tipo de conductas”.
Esta es la segunda destitución de servidores públicos del Gobierno de Guadalajara en esta administración y actualmente hay seis investigaciones por conductas de violencia en razón de género y tres investigaciones por conductas de hostigamiento o acoso laboral. (Por Héctor Escamilla Ramírez)