Las dos personas detenidas por su presunta participación en el atentado con explosivos de Tlajomulco son chivos expiatorios, asegura Blanca Magallanes, hermana de uno de ellos.
Señala que su hermano Samuel es dueño de un centro de rehabilitación ubicado a unos metros del sitio donde ocurrió el atentado; de ahí que el otro detenido de nombre Sergio y otro de los anexados resultaron heridos.
“Mi hermano simplemente también fue víctima de eso y él no tuvo nada que ver porque hasta estuvo auxiliando en lo que pudo cuando a él no le pasó nada. Él ayudó. Sí porque él fue a atender al muchachito que llevaba y aparte a preguntar por sus… porque es dueño de un centro de rehabilitación y los jóvenes que sufrieron también, que fueron víctimas, fue a preguntar porque están a su responsabilidad”.
Blanca Magallanes asegura que aunque su hermano fue detenido desde la madrugada del miércoles 12 de julio no supo nada de él sino hasta el viernes 14. (Por José Luis Escamilla)