El olor a humo que cubre gran parte de la ciudad ahuyentó a muchos de los deportistas que todas las mañanas acuden al parque metropolitano para ejercitarse.
Sin embargo hubo algunos valientes que a pesar de la contingencia ambiental salieron a correr porque ya están acostumbrados, porque les ayuda para el estrés o porque de plano ni se dieron cuenta del olor sino hasta que ya estaban ahí.
“Pues sí, un poco sí. Pues la costumbre yo creo. No le pica la nariz? Hasta ahorita no. Ve más gente? Veo como un 30 por ciento. Sí bajó mucho” “Sí claro que sí, por cuestiones de salud para la ansiedad, para el estrés. Por eso estoy aquí”. “Pues sí me preocupa pero pues qué hacemos, verdad? La gente sigue de inconsciente. Pues sí nada más que ya había salido cuando dije la contingencia pero ya me voy a retirar”.
La recomendación de las autoridades ante la mala calidad del aire que prevalece en la ciudad es que la población se abstenga de hacer actividades al aire libre y que se coloquen trapos húmedos en ventanas y puertas para evitar el ingreso del olor a quemado. (Por José Luis Escamilla)