Durante la temporada decembrina, las quejas por ruido ante el ayuntamiento de Guadalajara se incrementan de 30 a 40 por ciento. La autoridad municipal insiste que antes de llegar a la multa, se busca que el infractor por sonido excesivo le baje al ruido por convencimiento propio y es en las últimas instancias, si existe reincidencia, cuando se aplica la multa.
La directora de Justicia Cívica Municipal, Patricia Paola Franco Mendoza, explica que si el infractor insiste en no bajar el ruido se procede a la sanción:
“Puede ser desde una amonestación verbal, puede ser arresto, que son de 20 a 36 horas de arresto, una multa que la multa es que es de 20 a 500 UMAS, así que la multa más baja está rondando entre los 2 mil 800 pesos un poquito más y la más alta está en más de 48 mil pesos”.
En caso que el infractor no se presente a comparecer con el juez cívico, se aplicara una multa que se cobrará en el predial. (Por Héctor Escamilla Ramírez)