A pesar de la violencia, las marchas y la inflación, en México no hay un ambiente enrarecido ni tampoco polarización, asegura el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Es que la gente no tiene ánimo de dañar, pero no hay un ambiente de odio o de violencia, afortunadamente. Se enojan e insultan, pero no pasa de ahí, pero la gente no está en el ánimo de hacer daño. Hasta la señora que dijo que yo era de Tabasco y de Macuspana, e indio pata rajada, ofreció disculpas, pero no a mí, a mis paisanos”.
Lo anterior luego de que un civil que resultó ser un militar destituido, se colara el lunes pasado a Palacio Nacional al momento en que se celebraba la conferencia Mañanera. Aunque no pasó nada, el hecho sí fue notorio. (Por: Arturo García Caudillo)