Defiende el presidente Andrés Manuel López Obrador, su decisión de declarar como obra de seguridad nacional al Tren Maya.
“Se decidió que es un asunto de seguridad nacional y que no por los intereses de un grupo de corruptos y de pseudo ambientalistas vamos a detener una obra que es en beneficio del pueblo, y que además ya el tiempo que se llevaba parada nos estaba significando un alto costo al presupuesto, que es dinero del pueblo, nada más por intereses políticos de estos conservadores corruptos. No”.
Aseguró que no hay posibilidad de que se le acuse de desacato, porque existe el mecanismo legal que le permite declarar obras del gobierno como de seguridad nacional, y habló de una conspiración al interior de su administración para evitar que siga avanzando su movimiento, lo que provocó que los trabajos del Tren Maya se retrasaran. (Por Arturo García Caudillo)