En las últimas semanas, vecinos de colonias como Ladrón de Guevara, Villaseñor o Monraz han señalado la presencia de ardillas no sólo en sus jardines sino en azoteas y hasta adentro de sus casas.
El problema es que las ardillas siempre han estado ahí, el ser humano es el que las invadió, lamente Aldo Dávalos, contorlador de plagas de la empresa Sierra Verde, Soluciones Ambientales, quien agrega.
“Lo que está pasando es que siempre estuvieron aquí, tal vez no eran tan evidentes, pero como ya no permitimos que entre el coyote o el zorro o el lince o las serpientes, los animales que las controlaban pues ya se están reproduciendo sin que nadie se las coma. Entonces ya parece ser en este momento que ya hubiera un descontrol”.
Dice que cada vez son más frecuentes ver ardillas sobre avenida López Mateos o en la zona Minerva, muchas de estas que han huido de sus zonas naturales para irse a vivir a la ciudad. (Por José Luis Jiménez Castro)