En una ciclovía llena de basura, hojarazca, con olor a orines se ha convertido la de avenida Juan Palomar entre la glorieta de avenida México y avenida Vallarta.
En cada esquina los mazetones se ven con la hierba crecida o de plano convertidos en basureros.
El agua que se mina invade el piso de la ciclovía y el olor nauseabundo es parte del escenario.
Por las noches, la falta de luz invisibiliza esta ciclovía, lo que provoca que algunos vehículos choquen con las jardineras.
Dicen vecinos de la colonia Vallarta San Jorge que desde que la inauguraron a la ciclovía de Juan Palomar, atrás de Galería del Calzado ya nadie le ha metido mano. (Por José Luis Jiménez Castro)