Tras las críticas y voto en contra de morenistas, pues afirman que la restructuración de la deuda de Guadalajara empeñaría los recursos de las próximas administraciones, el presidente municipal de Guadalajara, Pablo Lemus, defendió el procedimiento. Insistió el edil que el dinero que se ahorren con mejores tasas de interés sería cercano a los 380 millones de pesos que se usarán para inversión pública.
Luego de la negativa de Banorte y BBVA a refinanciar la deuda municipal, Lemus señaló que buscarán una institución que ofrezca condiciones más favorables al municipio a través de una licitación pública nacional.
“Lo que propusimos fue reducir las tasas y flexibilizar las condiciones de pago para liberar recursos en beneficio de Guadalajara y poder anticipar inversión en materia de obra pública”.
La oposición a esta reestructura es porque se patearía la deuda a 15 años más y eso implica intereses por un monto cercano a los 300 millones de pesos que se sumaría a los 500 millones que ya arrastra el municipio. (Por Héctor Escamilla Ramírez)