En el edificio administrativo de la Universidad de Guadalajara ya comenzaron a cambiar los enormes cristales de ingreso al inmueble vandalizados en la manifestación de la semana pasada y terminaron por despintar los pedestales de los cuatro monumentos averiados aunque aún falta repararlos.
De la misma manera, una gran cantidad de establecimientos comerciales graffiteados durante la marcha ya fueron repintados, pero con dinero de sus propios bolsillos, no de la autoridad como se había prometido. (Por José Luis Jiménez Castro)
