Migrantes de varias nacionalidades que realizan protestas y marchas en Tapachula, Chiapas, se cosieron los labios para iniciar una huelga de hambre ante la negativa de las autoridades de darles libre tránsito por el país para llegar a Estados Unidos.
Hombres y mujeres se suturaron los labios al señalar que ya no aguantan estar varados en esa ciudad fronteriza de Chiapas donde llevan entre seis y ocho meses en espera de papeles migratorios.
La protesta se realizó afuera de la subdelegación de regulación migratoria conocida como Migración Sur.